Como al final paramos en Lancastet, pegaditos a la M6, la reincorporación fue más rápida, al poco de empezar el viaje, entramos en Escocia, con los viajeros dormidos.
Los radares de tramo en España son relativamente novedosos, pero en Escocia están a la orden del día, y además combinado con fijos dentro de los de tramo. Lo que me falta por saber es si miden la medida en varias partes del tramo, porque algunos actúan durante 50 km de trayecto. Ya veremos si nos llega alguna multa. Íbamos con Gps que ayudaba, pero no estoy seguro... Notar que si lleváis caravana, debéis reducir más o menos 10/15km la máxima de la carretera.
Otra cosa, que a los españoles nos llamará la atención, es que por lo general son muy corteses en la carretera. Si te dan las luces tras una maniobra de adelantamiento, no es: "¿Que haces?", sino que te indican, que puedes volver al carril con seguridad, suele responderse con los warnings. Y tampoco se estresan si tienen que ir detrás de ti y no pueden adelantar.
Al final tras unas cuantas paradas, llegamos a las 2 de la tarde al camping de Rothiemurchus.
Llevábamos dos jornadas de conducción, así que tras montar la caravana, comer algo, la tarde era para relajarse un rato.
Nos hicimos con el camping, que tenía una zona de acampada libre dentro del bosque increíble, y los servicios de bastante calidad, a destacar que era como el baño de tu casa, una habitación que tenía ducha, lavabo y wc todo junto, ideal para familias.
Luego fuimos al pueblo más cercano, 3km, donde había un Tesco, vamos un Mercadona o similar. Otra cadena tipo Carrefour es ASDA, por si tenéis que buscar en una ciudad más grande.
Tras comprar algo de comida fresca, recordar que vinimos en ferry, en un viaje de 20 horas, donde la nevera eléctrica no iba a aguantar y poner la de gas, no era plan.
Así que tras la cena, terminamos de ajustar planing...
Si viajas con niños tendrás que tener claros sus limites, y que en Escocia las carreteras, aunque bien conservadas, no son todas autopistas, y mantener la velocidad media que propone el gps es difícil.
Si viajas con niños tendrás que tener claros sus limites, y que en Escocia las carreteras, aunque bien conservadas, no son todas autopistas, y mantener la velocidad media que propone el gps es difícil.
Un último detalle que llama la atención, el grifo de agua fría y caliente, suelen estar por separado, así que agua ardiendo o fría. En las duchas, había monomando, pero no abre y cierra, una vez ajustdo la temperatura, tienes que girar para cerrar. En algunos sitios fría y caliente están unidos, pero con dos grifos.