2° día. Vamos al ferry

Bueno, pues el día no se ha dado mal. Teníamos que ir de Riaza a Santander.

 Nos levantamos tranquilamente a eso de las 9, hacía bastante viento en Riaza, así que fue divertido desayunar agarrando los vasos, pero bien, terminamos y a eso de las 10:30 ya estaba todo recogido y en marcha.

Con nuestro coche (Toyota corolla verso 2.2DCAT) el consumo medio en carretera es de 7.5 litros, y el depósito (por la opción de las  5+2 plazas y la rueda de repuesto) creo que no llega a los 45 litros, asi que la autonomía en el mejor de los casos son 500km. Si a eso le sumamos que tirando de la caravana, el consumo se dispara a casi los 11... La tónica del viaje nos lleva a parar cada 2 horas a descansar y repostar por lo que pueda pasar 😃

El caso es que hicimos la primera parada a eso de las 13, repostamos y seguimos rumbo.

Otro detalle es que (aunque el coche en este caso no tenga problema) no puedes ir a más de 90-100 km/h con lo que la estimación de llegada que te dan los gps convencionales va aumentando cada km que pasa pues si vas por autopista consideran que la velocidad a la que vas es 120km/h. Por tanto se suponía que íbamos a llegar a las 13:50 cuando salimos, pero ya cerca de Santander (sumando la parada de la gasolinera que mínimo fueron 10 minutos) ya nos decía que a las 14:40 así que tiramos de móvil y vimos que teníamos en Torrelavega un McDonald.

Nos disponemos a hacer la aproximación, esta en una zona de centro comercial, y resulta que hay bastante aparcamiento libre en el exterior, con lo que dejamos la caravana en unas 5 plazas en batería más o menos. Recogemos espejos y vamos a por el menú, mientras lo tomamos y las niñas juegan, echamos un vistazo desde lejos para ver qué las bicis que llevamos siguen en su sitio, para la próxima traeremos una cadena.

Pero nada, se dio bien y re emprendimos marcha, y llegamos enseguida a Santander. Hay que decir que las indicaciones de Ferry vienen perfectamente puestas y no hay ningún problema en seguirlas, y cuando ya separan a los pasajeros de lo coches y caravanas también, así que llegamos al puerto sin problemas a las 15:30 aproximación (el ferry salía a las 21:30).

En una primera vaya te dejan pasar al ver que eres caravana y luego en la siguiente hay que decir el número de embarque y presentar dni de todos, comprueban y te mandan a un aparcamiento donde había como unas 12 (aprox) filas.

A nosotros nos ponen en la 5 donde estaban las caravanas. Por ejemplo en la 1 había motos y bicicletas (unos campeones) y el resto eran coches y auto caravanas. Nos dicen que podemos visitar la ciudad, ir a una cafetería que hay dentro del puerto, pero que tenemos que estar a las 19:15 en el coche que empieza el proceso de embarque.

Así que recogemos todo un poco dejamos listo lo que nos vamos a subir al ferry y nos vamos a dar una vuelta por Santander. Paramos un rato en un parque, seguimos paseando y terminamos en la Catedral donde en una visita guiada por 1 euro, nos enteramos de algunas cosas que no sabíamos sobre Santander... pero bueno eso es aparte.

Estamos de vuelta en el coche a eso de las 18:15. El ferry ya ha llegado y empieza a descargar coches... Vemos el proceso, fotos y demás. A las 19:10 empieza a moverse las motos, luego algunas filas de coches y a eso de las 19:40 nosotros que  vamos nosotros, pasamos por aduna donde nos piden dni y pico más y directamente al barco, viendo que a las motos las tenían a todas juntas bajo un techado.

 El proceso de embarque con la caravana se da bien, todo más amplio de lo que puede esperamos y tenemos la suerte de que no nos toca maniobrar para rellenar fila delante de una "columna" así que genial, freno de mano y nos dan tarjeta para recordar escalera f3.

Y vamos a explorar el barco! Primero al camarote, con 2 niñas nada de pasar la noche en unos sofás (era una opción) estaban terminando de limpiar algunos, pero el nuestro estaba listo.

Luego a ver el resto del barco, zona infantil, pintacaras, restaurantes variados, piscinas (pequeñas y cubiertas) zona para perros... La verdad es que de todo y muy bien.

A las 9 ya habíamos echo un reconocimiento y todavía no habíamos salido y aún había coches por embarcar.

Nos vamos a cenar, una par de menús infantiles (11 libras) y un principal y ensalada a compartir (16 libras creo) con sus bebidas.

Después otra vuelta, pasamos por la zona de espectáculos (una cantante) y a las 11 al camarote (2 literas). Cambio de hora (una hora menos) un poco de juegos (ir calmando a las niñas de tanta emoción) y al final nos dormimos a eso de las 11:30.